No cabe duda que los avances tecnológicos impactan en todos los sectores de la
vida cotidiana. Tal es el caso de la aeronáutica cuyo mayor cambio fue sustituir los
fuselajes de madera por las aleaciones de acero inoxidable a principios de 1920.
El acero inoxidable es un excelente material por su peso ligero, su resistencia al
calor y, en comparación con otros materiales, su bajo costo.
Además de estas características generales, el acero inoxidable aeronáutico se
caracteriza por:
Alta resistencia al peso
No se fragiliza a causa de las bajas temperaturas. De hecho, cuando este
fenómeno se presenta, el acero inoxidable se fortalece sin perder su
ductilidad.
Comparado con otros materiales, el acero inoxidable aeronáutico puede
mecanizarse más fácilmente.
Cuenta con una gran resistencia a la corrosión como consecuencia del
ambiente.
Posee una excelente conductividad eléctrica y térmica.
Es ideal para almacenar alimentos y bebidas.